México, 8 ene (EFE).- Pese a tener problemas, México debe también publicitar sus reformas y mejoras hacia el exterior en el marco de un entorno internacional “enredado” y con profundos cambios, dijo hoy el secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría.
En una presentación en la XXIX Reunión de embajadores y cónsules en la Ciudad de México, el titular de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) remarcó en varias ocasiones que México debe “cacarear el huevo”.
“Un huevo del tamaño de avestruz”, dijo Gurría, quien insistió en en utilizar todos los medios con que cuentan “para difundir estas verdades” de México al mundo.
Alabó, como ha hecho en otras ocasiones, el paquete de reformas impulsado durante el mandato de Enrique Peña Nieto (2012-2018) – como la energética o la de telecomunicaciones – “el más impresionante e importante llevado a cabo por algún país de la OCDE”.
Estos cambios permitieron defender al país de las “turbulencias” y, por ejemplo, disminuir su dependencia presupuestaria de los ingresos petroleros.
Además, el país crecerá un 2,4 % en 2017, por arriba de la media de 1,8 % de OCDE. No obstante, debería crecer al doble para “emparejarse” con las naciones de la OCDE.
“Vamos en un proceso de recuperación, pero antes de la crisis crecíamos al 4 %”, recordó.
“No quiero parecer inocente ni tapar el sol con un dedo, los problemas existen, hay que abordarlos y negociarlos, pero lo que está ocurriendo en el terreno es que las cosas van caminando aún en este contexto tan complicado”, señaló el secretario general, quien fue canciller de México entre 1994 y 1998.
Negativamente, recordó que en el país -que se halla en una “metamorfosis compleja” pero “llena de oportunidades”- hay todavía un elevado índice de pobreza, superior al 40 %, una alta tasa de informalidad, una baja productividad y un repunte de la criminalidad.
Asimismo, habló de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entre México, Estados Unidos y Canadá, y deseó que quede en una mera modernización, una “puesta al día”.
La nación latinoamericana enfrenta todos estos retos en un contexto internacional “enredado” donde el multilateralismo está “sometido a presión”.
Como ejemplo de esta complejidad internacional habló de España y el proceso independentista en Cataluña, que impactó al “pueblo español, inversionistas y autoridades”.
En sus palabras inaugurales, el canciller de México, Luis Videgaray, remarcó precisamente la voluntad multilateralista de México, calificando de “falso dilema” a quienes defienden que participar en foros internacionales resta soberanía nacional.
“La relación entre naciones no es solo coexistencia, sino promover valores comunes para enfrentar enormes retos como cambios tecnológicos, climáticos, de migración o de armas nucleares”, apuntó.
En su discurso, de unos 40 minutos, repasó temas como la proliferación de armas nucleares y la posición mexicana ante la “amenaza de Corea del Norte”.
Apostó por el Pacto Global de Migración y reiteró que México mantendrá la embajada en Tel Aviv (Israel), instando a una negociación “integral” entre las partes.
Sobre Estado Unidos, celebró avances “de forma significativa” para establecer una “buena relación de trabajo” y dijo que México está “en buenas manos” en sus múltiples negociaciones con el país vecino, como las del TLCAN.
Destacó que se reforzó la protección de los mexicanos en el exterior, una estrategia que se mantendrá. Solo en 2017 se llevaron a cabo más de 580.000 asesorías.
Reiteró que México seguirá participando como observador en el diálogo para solucionar la crisis en Venezuela, siempre y cuando las condiciones sean “idóneas” en las negociaciones bajo el auspicio de la República Dominicana.
Finalmente, instó a los diplomáticos a actuar con “absoluta neutralidad e imparcialidad” de cara a los comicios “sin precedentes” del 1 de julio del 2018, cuando se elegirán a más de 3.400 cargos públicos, entre ellos el presidente mexicano.