Recientemente, un video ha circulado en las redes sociales mostrando un incidente en el que un avión ruso se acerca peligrosamente a un dron en aguas internacionales. Este incidente ha generado preocupación y controversia en la comunidad internacional.
Según informes, el dron en cuestión pertenecía a la Armada de los Estados Unidos y estaba llevando a cabo una misión de vigilancia en el mar Negro. El avión ruso, identificado como un Su-27, se acercó al dron a una distancia peligrosamente cercana, lo que provocó que el dron tuviera que maniobrar bruscamente para evitar una colisión.
El Departamento de Defensa de los Estados Unidos ha emitido una declaración condenando el comportamiento del avión ruso, calificándolo como “peligroso e poco profesional”. También ha señalado que este tipo de incidentes son cada vez más frecuentes en la región y que representan una amenaza para la seguridad de las operaciones militares.
El Ministerio de Defensa de Rusia, por su parte, ha negado que el avión ruso haya actuado de manera imprudente o peligrosa, argumentando que estaba llevando a cabo una misión de interceptación de un objetivo no identificado cerca de la frontera rusa.
Este incidente ha vuelto a poner de manifiesto la tensa situación entre Rusia y los Estados Unidos en la región del mar Negro. A pesar de los esfuerzos diplomáticos para reducir las tensiones, las operaciones militares de ambos países en la región siguen siendo motivo de preocupación para la comunidad internacional.
En conclusión, el incidente del avión ruso acosando al dron en aguas internacionales es un ejemplo más de la tensión y la rivalidad entre Rusia y los Estados Unidos en la región del mar Negro. Esperemos que ambos países puedan trabajar juntos para reducir las tensiones y evitar incidentes peligrosos como este en el futuro.