La Sorprendente Travesía de María Corina Machado y su Futuro
La primera noche en Oslo no ha sido sencilla para María Corina Machado, quien ha lidiado con la emoción de finalmente reunirse con su familia y amigos tras meses de clandestinidad. A pesar de la falta de descanso, su energía se hizo evidente cuando apareció ante los medios este jueves, junto al primer ministro noruego, Jonas Gahr. “Ha sido uno de los momentos más extraordinarios y espirituales de mi vida”, expresó emocionada, revelando que no pudo contenerse al abrazar a sus tres hijos en el Grand Hotel de Oslo.
Durante el día, Machado participó en dos ruedas de prensa. En la primera, más breve, estuvo acompañada por Gahr; en la segunda, desde uno de los salones del hotel, abordó preguntas de los medios. La pregunta más recurrente fue: ¿cómo logró salir de Venezuela?
“Algún día les contaré cómo lo hice”. “Pero ha sido toda una experiencia”, agregó, agradeciendo a “todos los hombres y mujeres que arriesgaron sus vidas para que hoy estuviera aquí.”
Aunque no ha revelado completamente los detalles de su huida, ciertos informes han comenzado a ofrecer un vistazo de su odisea. Machado logró salir de Venezuela en una travesía digna de película: disfrazada y pasando checkpoints militares, se embarcó en una lancha pesquera que la llevó hasta Curazao. Desde allí, tomó un vuelo privado que la desplazó más de 8,000 kilómetros hacia Oslo. El Departamento de Estado de EE. UU. ha declinado comentar. Sin embargo, la líder opositora enfatizó que por el momento prefiere no revelar detalles específicos para proteger a quienes la asistieron.

Lo que sí mencionó fue que recibió ayuda del Gobierno de Estados Unidos. Además, la falta de conocimiento del régimen venezolano sobre su paradero probablemente facilitó su escape. Como ella misma apuntó, “No creo que supieran dónde he estado. De saberlo, habrían hecho todo lo posible para impedirme estar aquí”.
La aparición pública de Machado esta semana fue la primera en 11 meses. La exdiputada y cabeza del movimiento político Vente Venezuela entró en la clandestinidad en enero, tras la investidura de Nicolás Maduro para un nuevo período presidencial. Durante esos meses, continuó conectándose con el público a través de entrevistas y foros virtuales, pero siempre preocupada por su seguridad y la de su entorno ante posibles represalias del régimen.
El 10 de octubre, el Comité Noruego del Nobel sorprendió a la cúpula política de Venezuela al anunciar que otorgaría el Premio Nobel de la Paz 2025 a Machado, reconociendo su lucha por la democracia y los derechos ciudadanos. Aún en la clandestinidad, Machado expresó su agradecimiento, considerando el galardón como un paso hacia la transición en su país.
Por lo pronto, María Corina ha manifestado en sus intervenciones que desea dedicar tiempo a sus familiares y amigos que están a su lado en Oslo. También planea hacerse un chequeo médico, aprovechando la atención que le brinda el entorno noruego.
Sin embargo, hay algo claro en su discurso: aunque no tiene una fecha exacta para su regreso, está decidida a volver a Venezuela. Y si “el régimen sigue en el poder”, asegura que estará lista para rodearse de su gente, manteniendo la intención de que “no sabrán dónde estoy; tenemos maneras de lograrlo”.
La travesía de María Corina Machado es solo el comienzo de una nueva etapa. Con el reconocimiento internacional de su lucha y el apoyo de la comunidad mundial, su determinación se siente más fuerte que nunca.

