Tres bomberos estadounidenses, parte de la fuerza de equipos especializados en control de incendios, que fueron enviados para combatir los devastadores incendios forestales fallecieron en el accidente del Hércules C-130 en el sur de Australia
Por los momentos, la empresa canadiense propietaria del avión Hércules C-130 decidió suspender los vuelos de sus aviones hasta que se efectúe una revisión total de sus equipos.
El accidente eleva a 32 el número de fallecidos por los incendios forestales que se iniciaron en septiembre de 2019 y aún están resistentes.
Es muy posible que fuertes vientos que también azotan la zona estén obstaculizando los vuelos de las aeronaves y podrían ser la causa del accidente.
La labor que vienen realizando los bomberos hace evidente el riesgo, sacrificio y tesón de esos valientes héroes.
Más de 70 aviones efectuaron misiones este jueves en su lucha contra el fuego.
Los incendios hasta el momento han destruido más de 10,4 millones de hectáreas (25,7 millones de acres), así como también más de 2.600 hogares.