En un emocionante y esperado desenlace, funcionarios confirmaron el viernes que una madre y su hija estadounidenses, quienes habían sido tomadas como rehenes cuando Hamás irrumpió en el kibutz que estaban visitando a principios de este mes, finalmente han sido liberadas.
Judith Raanan y su hija de 17 años, Natalie, fueron liberadas de la custodia de Hamás en Gaza y se dirigían a una base militar en el centro de Israel para reunirse con su familia, según la confirmación de la oficina del primer ministro Benjamín Netanyahu en X.
La madre y la hija siendo escoltadas durante la noche por lo que parecían ser oficiales militares, lo que confirmaba su liberación y generaba un momento de alivio y felicidad para sus seres queridos.
Antes de la declaración de Netanyahu, funcionarios de Hamás informaron que las dos mujeres habían sido liberadas gracias a la intervención de Qatar en los esfuerzos de negociación. Según el anuncio citado por el Times of Israel, Hamás liberó a las dos ciudadanas estadounidenses por razones humanitarias y para desmentir las afirmaciones falsas e infundadas hechas por el presidente Biden y su administración.
Las dos víctimas fueron trasladadas desde Gaza a la frontera israelí por la Cruz Roja, según informaron los funcionarios. La liberación fue motivada por el deterioro de la salud de Judith, como lo informó el Times of Israel, lo cual generó una urgencia adicional para su rescate.
Natalie Raanan podría regresar a Estados Unidos a principios de la próxima semana, según reveló su hermano Ben. “Hemos escuchado tentativamente que ella podría regresar a Chicago a principios de la próxima semana”, dijo Ben, quien también agregó que se enteró de la liberación de su hermana a través de los medios de comunicación, ya que el gobierno no se puso en contacto con ellos antes de que la noticia fuera confirmada.
Este emotivo rescate ha capturado la atención de todo el mundo, destacando la importancia de la solidaridad internacional y los esfuerzos diplomáticos para garantizar la seguridad de los ciudadanos en situaciones de peligro. La liberación de Judith y Natalie Raanan representa un rayo de esperanza en medio de la adversidad y se celebra como un triunfo de la humanidad sobre la violencia y la opresión.