Se han intensificado los protocolos de seguridad en Estados Unidos después de que un agente especial del FBI afirmara que miembros del Tren de Aragua, una banda delictiva venezolana, se están infiltrando entre los grupos de migrantes que solicitan asilo en el país.

El agente especial adjunto del FBI de El Paso, Britton Boyd, declaró: “El Tren de Aragua está en Estados Unidos. Tenemos pruebas de que han cruzado la frontera. Ellos están entrando y hay una presencia”.

Se ha observado una serie de incidentes violentos en Nueva York y Chicago en los que se ha implicado a venezolanos supuestamente vinculados con el Tren de Aragua. Estos incidentes han revivido recuerdos de la década de 1980, cuando el régimen cubano permitió la salida masiva de cubanos hacia Estados Unidos a través del puerto de Mariel, infiltrando delincuentes y personas con enfermedades mentales entre los exiliados.

El ex subdirector del FBI, Chris Swecker, hizo un paralelismo entre la situación actual y la crisis de Mariel, señalando que entre 16.000 y 20.000 de los llamados “marielitos” eran criminales.

Sin embargo, hasta ahora no existen pruebas documentadas que respalden la afirmación de que el régimen venezolano está enviando intencionalmente delincuentes a Estados Unidos.

Se han detectado miembros del Tren de Aragua en varios sectores fronterizos de Estados Unidos, según informes de la Patrulla Fronteriza. También se ha advertido sobre la posible alianza entre miembros del Tren de Aragua y la Mara Salvatrucha, una peligrosa organización criminal.

Expertos en seguridad han planteado preocupaciones sobre la posible aparición de brotes de violencia en Estados Unidos, similares a los ocurridos en la década de 1980 con los “marielitos”.

Aunque se han implementado mecanismos de seguridad y sistemas de reconocimiento facial en la frontera sur de Estados Unidos, se requiere una documentación adecuada y confirmación más allá de los informes de inteligencia para demostrar la presencia del Tren de Aragua en el país.

La presencia del Tren de Aragua en Estados Unidos no parece ser parte de una política estatal, sino más bien una expansión de la banda aprovechando el éxodo de venezolanos en América Latina.

La banda del Tren de Aragua ha operado en nueve países de América Latina desde 2014 y ha sido liderada por Héctor Guerrero, alias el “Niño Guerrero”. Aunque se han identificado miembros del grupo en Estados Unidos, no está claro si están llevando a cabo actividades similares a las que han realizado en otros países.

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