Los perros son el mejor amigo del hombre, pero también lo son el resto de mascotas, nos brindan compañía, cariño, lealtad y forman parte de nuestra familia
El mal aliento de los perros, o mejor conocido como halitosis, no es una enfermedad. Pero es sí es una señal de que algo no está bien en su organismo.
También puede tratarse de una inflamación en las encías con presencia de cálculo y la placa bacteriana; el acumulo de comida, pelos y otros elementos pueden agravar el cuadro de mal aliento.
Si estás pasando por esta situación con tu perro, lo mejor es que acudas a un veterinario, para que le realicen los exámenes necesarios que determinen el origen de su mal aliento.
Limpieza Dental:
Lo primero es evitar que la comida se acumule en los dientes. Puedes hacerlo con una dieta balanceada, jueguetes y huesos diseñados para ayudar a limpiarlos. Así como también una revisión oral dos veces al año.
La manera más recomendable para no lesionar ningún área bucal de tu perro con el “cepillado” de los dientes, es envolver el dedo índice con un trozo de gasa, humedecerla y aplicar con el dedo una crema dental destinada a su uso. ¡No utilices tu crema personal!, pues la cantidad de flúor que contiene es tóxico para los animales.
El lavado de dientes con cremas dentales para animales, se puede realizar dos o tres veces al mes. Ten cuidado, porque hasta el perro más tranquilo puede ponerse agresivo si siente incomodidad o dolor.
Productos naturales que pueden ayudar con el mal aliento de tu mascota:
Aceite de coco:
Es considerado un potente antiséptico, antimicrobiano, antibacteriano, antifúngico, antinflamatorio y regenerador, entre otros aspectos. Puedes poner una cucharada, 2 o 3 días a la semana en la comida de tu perro, hasta que mejore.
Canela:
La puedes añadir a los alimentos y bebida del animal, sirve para acabar con la halitosis.
Agua Mineral:
Ayuda a prevenir un problema de aliento fétido o apestoso en perros. Esto mejora su sistema digestivo y de los riñones.
Perejil:
Es rico en antioxidantes que alivian el malestar estomacal y los problemas digestivos, también refresca el aliento. Puedes agregar pequeñas cantidades a su comida.
Trigo fresco:
Es una fuente cruda de clorofila, por ello, que ayuda a mejorar el olor bucal, un excelente remedio casero que soluciona el mal aliento.
Probióticos:
Aportan bacterias buenas para que la boca de tu mascota no genere halitosis.
Vinagre de manzana:
Es desintoxicante, digestivo, antibacteriano y antiinflamatorio. Añádelo en su bebida para que lo ayude a refrescar su aliento.
Bicarbonato
Mezcla una cucharada de bicarbonato con un vaso grande de agua y moja el cepillo con esta mezcla para limpiar los dientes de tu perro a diario.
Causas más frecuentes de halitosis en perros
Las causas del mal aliento en perros pueden ser muy diferentes. Por lo general, los motivos principales de la aparición del mal aliento en perros son:
- Trastornos bucodentales como caries, gingivitis, sarro u otras patologías infecciosas.
- Infecciones en la faringe
- Patologías del sistema digestivo
- Complicaciones del aparato respiratorio como rinitis o sinusitis
- Infecciones o trastornos renales
- Diabetes
Aquí tienes cinco consejos a tener en cuenta para que tus mascotas crezcan sanas, fuertes y, sobre todo, que sean felices
1. Crea un horario para sus necesidades
Establece una rutina regular de alimentación para que consigan hacer sus necesidades más o menos siempre a la misma hora. En el caso de tener un perro, intenta que tenga un horario establecido para salir a la calle.
2. Cuida su higiene y atención sanitaria
Según la mascota que tengas, deberás informarte bien sobre si tienes que cepillarla y con cuánta frecuencia, así como cada cuanto hay que bañarla. Es muy importante hacerlo de la forma adecuada para que su salud no se vea afectada.
Además, una correcta atención sanitaria es básica para que el animal esté seguro. Al adoptar a una mascota, se debe tener un control de las visitas al veterinario, así como las vacunas pertinentes. Asimismo, si notas algún comportamiento extraño como pérdida de apetito, rechazo al agua, variación exagerada de peso o lentitud al jugar, acude directamente al especialista para que lo examine.
3. Dieta y ejercicio
Una buena alimentación y un ejercicio adecuado es vital para el bienestar de los animales. Cada mascota tiene su propio tipo de comida que va variando con la edad y el peso. Si tienes alguna duda sobre su alimentación, acude al veterinario para que te indique los alimentos concretos que debes darle.
En cuanto al ejercicio, también habrá que acomodarlo al tipo de animal. Los perros pequeños, por ejemplo, suelen ser más enérgicos que los grandes, por lo que necesitarán más tiempo para jugar.
4. Supervisa su dentición y masticación
Es igual de importante el tipo de comida que ingiere tu mascota como si lo hace correctamente. En el caso de los cachorros, por ejemplo, es indispensable que tengan un ‘mordedor’, como un hueso de goma, para que le salgan todos los dientes.
Asimismo, se debe controlar con frecuencia el sarro y la placa dental del animal para que pueda ingerir los alimentos correctamente.
5. Entrénalo
La mejor forma de alejar a tu mascota de algún posible peligro es entrenándolo correctamente. Un primer paso es que reconozca su nombre. Para conseguirlo más rápidamente, puedes pronunciarlo cada vez que le felicites y le des de comer.
Por otra parte, también debes acostumbrarle a los pequeños cambios poco a poco. Por ejemplo, si tienes pensado hacer un viaje largo en coche, realiza antes algunos trayectos cortos con tu mascota para que se sienta más cómodo.