San Juan, 7 ago (EFEUSA).- Representantes del sector de la salud en Puerto Rico, como la antigua cirujana general de EEUU Antonia Coello, exhortaron hoy a los padres a que vacunen a sus hijos para el comienzo del curso escolar y obvien las opiniones de otros que alegan que las vacunas provocan enfermedades.
Igualmente, la organización VOCES Coalición de Vacunación y Prevención de Puerto Rico, propuso la inclusión de propuestas en el Proyecto de la Cámara 1303, como el que las aseguradoras cubran el costo y administración de las vacunas, compartiendo la responsabilidad con el Departamento de Salud.
Los portavoces también exigen cambios en los artículos 8 y 9 de ese proyecto legislativo, que ordena a las escuelas a mantener un récord de inmunización y radicar un informe sobre las tasas de vacunación al Departamento de Salud, y en el artículo 7, que tipifica como delito menos grave el incumplimiento de la ley con pena de cárcel y/o multas.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, la inmunización evita entre dos y tres millones de muertes en el mundo cada año.
Gracias a las vacunas, enfermedades mortales, como la viruela, se han erradicado y otras, aunque no han desaparecido en su totalidad, han logrado ser controladas.
“Somos muchos los grupos que creemos fielmente en la vacunación y que es la mejor herramienta para enfrentar enfermedades que podrían causar hasta la muerte”, sostuvo en rueda de prensa la fundadora y presidenta de la organización VOCES, Lilliam Rodríguez.
Rodríguez indicó que para ella existen “tres tipos de padres” en el proceso de vacunación: el fiel convencido de que las vacunas funcionan, el que no, que constituye entre el 5 o 6 % de la población, y que está en el medio buscando información es desinformado y pone en riesgo en decidir si vacunarlo o no.
Algunas de las vacunas que exhorta el Departamento de Salud local a inyectarle a los niños son tétanos, polio, gripe tipo B, hepatitis B, sarampión, varicela y neumococo.
“Los padres tiene una ventaja de explorar las redes sociales y recibir mensajes conflictivos llenos de información errónea sobre las vacunaciones a sus hijos”, dijo Coello, por su parte.
“Mantener la confianza del público con respecto a la vacunación es crucial para disminuir los brotes de infección”, enfatizó la destacada antigua cirujana general.
Coello detalló que el 20 % de los padres tienen dudas en la vacunación.
Las vacunas son productos biológicos que se administran para proteger contra una enfermedad, provocando que el cuerpo origine anticuerpos que producen una respuesta de inmunidad o defensa contra la enfermedad.
La importancia de las vacunas es que estas constituyen la primera línea de defensa en la prevención de enfermedades contagiosas que pueden poner en riesgo la salud de la población.
“Menos de un 5 % de la población no vacunada puede ser causante de la vuelta de las enfermedades que protegimos con la vacuna”, señaló Coello.
“Los padres creen que las vacunas afectan a los niños. La educación del padre es extremadamente importante para que los niños se puedan vacunar, y esa vacunación le puede tocar al Departamento de Salud porque a lo mejor el pediatra o el maestro no tienen el tiempo para llevar a colación lo que se necesita”, enfatizó.
Por su parte, Yvette Piovanetti, con más de 35 años de experiencia como pediatra enfatizó que la vacunación “fue uno de los momentos más importantes para el desarrollo de la pediatría para evitar morbilidad y mortalidad por muchas enfermedades que estaban acabando con nuestros niños”.
“Por lo tanto, cuando hay tantos hallazgos así, de tantos premios Nobel para la vacunación del polio, no se cuestiona”, expresó ante las dudas sobre si las vacunas causan autismo, pero la galena afirmó que “está comprobado que el autismo no está vinculado con las vacunaciones”.