La nueva tecnología basada en ADN, puede detectar la firma proteica específica de una infección. Su tamaño es comparado al de un dispositivo USB. Un microchip analiza una gota de fluido corporal como la sangre, la orina o la saliva.

El invento combina la tecnología de ingeniería electroquímica desarrollada por Soleymani y su equipo con la tecnología bioquímica desarrollada por Li y su colega Dingran Chang.

La nueva tecnología puede diferenciar las cepas de una misma bacteria que pueden ser tratadas con antibióticos de otras que son resistentes a los mismos, con esto se puede ayudar a combatir el creciente problema de la resistencia a los antimicrobianos.

Los investigadores estan probando mecanismos para que el dispositivo pueda detectar el virus que causa la COVID-19.

“Esta tecnología es muy versátil y estamos muy cerca de utilizarla para las pruebas de COVID-19”, indico Li, que también es miembro del Instituto Michael Groote de Investigación de Enfermedades Infecciosas de McMaster.

Los investigadores están explorando las aprobaciones reguladoras y las asociaciones con la industria para conseguir que la tecnología se utilice de forma generalizada lo antes posible, no sólo en Canadá, sino en todo el mundo, especialmente en aquellos lugares donde el acceso a las pruebas de laboratorio es limitado o inexistente.

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