Secretario de Defensa, Lloyd Austin, regresa a casa tras hospitalización mientras enfrenta interrogantes del Partido Republicano
El secretario de Defensa, Lloyd Austin, ha sido dado de alta y regresó a su hogar después de una hospitalización de varias semanas. Sin embargo, su regreso no ha puesto fin a las preocupaciones y cuestionamientos por parte de los legisladores, especialmente del Partido Republicano. Se ha desatado una inquisición encabezada por los republicanos para averiguar por qué Austin y su equipo mantuvieron en secreto su enfermedad y tratamiento.
Legisladores exigen transparencia sobre el secreto de Austin en torno a su enfermedad y tratamiento
Los legisladores de la Cámara y el Senado han exigido que Austin, quien se está recuperando de una infección relacionada con una cirugía anterior en diciembre para tratar el cáncer de próstata, sea más comunicativo y brinde detalles sobre su decisión de mantener en secreto su diagnóstico, incluso cuando fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos.
Hasta ahora, los funcionarios del Departamento de Defensa han evitado dar explicaciones claras sobre por qué los principales asesores de Austin no informaron al presidente Biden y a otros funcionarios sobre su enfermedad, y han eludido las solicitudes del Partido Republicano para una reunión informativa o una audiencia en persona con el jefe del Pentágono.
Partido Republicano solicita reunión con el jefe del Pentágono para obtener explicaciones
La falta de información ha llevado al presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, Mike Rogers (R-Ala.), a hacer un llamado público a Austin para que testifique el próximo mes sobre “las decisiones tomadas para ocultar información al Presidente, al Congreso y al pueblo estadounidense”. Rogers, quien inició una investigación formal sobre por qué Austin mantuvo su hospitalización en privado, expresó su decepción por la respuesta recibida en una carta enviada el jueves a Austin.
“La última vez que usted y yo hablamos, prometió total transparencia”, escribió Rogers. “Si bien respondiste algunas de mis preguntas, un número preocupante de ellas no fueron respondidas”.
Presidente del Comité de Servicios Armados insta a Austin a testificar sobre la ocultación de información
Austin, junto con su jefa de gabinete Kelly Magsamen y la subsecretaria de Defensa Kathleen Hicks, han respondido a varias preguntas planteadas por Rogers en cartas enviadas a los tres el 9 de enero. En su respuesta, Austin enfatizó que durante su estadía en el hospital no hubo lagunas en las autoridades o riesgos para el comando y control.
“Siempre hemos estado completamente preparados para apoyar al presidente como comandante en jefe durante mi estancia en el hospital”, escribió Austin. También proporcionó detalles sobre el cronograma de los eventos relacionados con su hospitalización y cuándo se informó a personas específicas sobre su condición.
“Reconozco que el cargo que ocupo requiere un mayor nivel de transparencia”, concluyó Austin, asumiendo la responsabilidad por sus decisiones personales relacionadas con la divulgación de su diagnóstico de cáncer.