Llegó el tenebroso día en que irrumpe en el país el COVID-19, hizo estragos que hasta ahora los estamos sintiendo y no se sabe cuándo van a cesar; después hacen su inquietante ingreso los “avispones asesinos”, casualmente los dos eventos se inician en Washington, luego aparecen las orugas voraces de la polilla Attacus atlas y el dragón azul marino. Ahora una nueva amenaza se cierne amenazante, es que una potencial tormenta anda formándose en estas costas y, aún no se está en temporada, estamos a más de una quincena del inicio de temporada de huracanes.
El inicio de la temporada de huracanes debiera comenzar oficialmente el 1 de junio, sin embargo, el Centro Nacional de Huracanes está haciendo el seguimiento a un área frente a la costa del Atlántico que viene presentando una alta posibilidad de transformarse tropical en días muy cercanos.
Según la visión del Centro Nacional de Huracanes, se espera que este fin de semana se presente un área de baja presión por las condiciones ambientales de la zona, lo que podría propiciar características subtropicales en cuanto vaya desplazándose con dirección al noreste hasta el domingo.
Del mismo modo, el modelo de pronóstico del euro señala que la formación de una baja presión subtropical al norte de las Bahamas alejaría el impacto directo en nuestra zona.