Page 10 - 75 Edicion Especial Jacksonville

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“Llegué como todos: empezando desde Su filosofía es clara: no ver de sus mayores desafíos y una de sus
cero”. Fue un proceso de adaptación, competencia, sino posibilidades. “Cada mayores fuentes de orgullo. A veces, su
de esfuerzo silencioso y esperanza quien tiene su talento. Hay espacio para bebé la acompañaba a mostrar casas,
sostenida por la fe. todos”. Hoy inspira a otras mujeres a citas de cierre, a reuniones rápidas.
—y especialmente a otras mamás “No es fácil, pero qué satisfacción tan
Entre esas jornadas, su novio —hoy inmigrantes— a construir sus sueños grande saber que he podido”, dice. Y
su esposo— le propuso considerar los sin miedo. agradece profundamente a quienes
bienes raíces. Tiempo después, una Jacksonville no es simplemente han sido empáticos y pacientes. Su hija
compañera de clases en UNF reforzó una ciudad para ella: es casa. La ha crecido viéndola trabajar, persistir,
esa idea. Y así, entre la intuición, una describe como tranquila, familiar, avanzar, y eso es parte de la enseñanza
guía amable y el empuje interior que luminosa, y agradece la oportunidad que Rosy quiere dejarle.
siempre la ha acompañado, Rosy que le ha dado para crecer, prosperar
obtuvo su licencia y entró al mundo y formar comunidad. “Me enamoré
inmobiliario en 2020. de Jacksonville. Aquí hay paz,
La decisión transformó su vida. Hoy oportunidades, familia. Es una ciudad
es Realtor top producer y Blue Diamond para progresar”.
Agent en La Rosa Realty North Florida,
y figura entre los tres agentes hispanos En el corazón de esa vida nueva
más destacados del condado de Duval. está su hija, Rosalynne Sofía, de
Ha ayudado a familias locales y tres años. Su motor, su luz, su razón.
recién llegadas, a compradores de Ser madre y agente inmobiliaria al
distintos países y culturas, a jóvenes mismo tiempo, sin una red familiar
que adquieren su primer hogar y a constante al inicio, ha sido uno
inversionistas que construyen futuro en
la ciudad.

El camino no estuvo libre de
obstáculos. “Escuché muchos no”,
recuerda. “Me dijeron que tenía acento,
que no conocía a nadie aquí, que ese
mercado estaba saturado”. En lugar
de frenar, usó esas palabras como
combustible. “Cuando alguien me
ponía un pero, eso me daba gasolina”.

Ser madre la hizo más
fuerte, y ser profesional

le enseñó a su hija a
soñar en grande.

10 Qué tal JACKSONVILLE
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