Page 44 - 51 Jacksonville Septiembre

Comunidad
Ismael Mercado

“Quiero ser un

empresario global”

A Mercado lo automático, siempre digo que aunque el capacidad comunicacional sorprendente.

Ismael
“Mi mamá tiene un corazón grande y una
caracteriza la elocuencia
trabajo no garantiza el éxito, sí nos hace
elegibles”, dice.
Hoy me sigue enseñando que uno como
al hablar; es carismático,
alegre y con un espíritu de
padre puede ser recto, pero se puede
De sus padres, Abel Mercado y Justina
comerciante cautivador.
enseñar desde el amor. A los hijos hay
Campo, heredó la inteligencia y la vivacidad
que darles de todo, pero también hay que
conferencista,
a la hora de hacer negocios. Por eso
Es
estratega personal y de
las cosas”, explica.
Nació
emprendimiento.
yo empecé a vender cosas, no lo hacía
por necesidad sino por esa chispa de ser
Luego, a través de una amiga de la
en Maracaibo, Venezuela; es hijo de padres afirma que “desde pequeño en el colegio darles frío y hambre, enseñarles a ganarse
colombianos y su sueño es convertirse en comerciante, eso viene desde mi familia”. familia, Ismael coincidió con un libro titulado
un empresario global. Rinoceronte. La forma diferente de ser
De su mamá admira su temple y un duro. Esas páginas y el ingreso a la
“Me gusta ser educado, colaborador sabiduría, la describe como una mujer organización Cámara Junior Internacional
y buen amigo. En ocasiones ejemplar y recuerda que cuando ella (CJI), influyeron de manera positiva en su
hasta pongo mi otra mejilla en y su papá viajaron a Maracaibo para vida y le enseñaron el camino que quería
situaciones donde debo ser dedicarse al comercio, decidieron recorrer.
más agresivo, no impulsivo, dejar todo atrás y se convirtieron
pero si espontáneo. No en un modelo gerencial, dando “El libro me hizo pensar que yo podía
me gusta vivir en modo prioridad al control presupuestario y la hacer lo que quería y CJI me hizo entender
maximización de recursos. que el mundo iba más allá de mi barrio y
que había mucho por descubrir más allá de
esas calles”, afirma Ismael
A partir de ese momento decidió estudiar
y capacitarse en el campo de la enseñanza y
la programación neurolingüística (PNL), una
técnica pseudocientífica de comunicación,
desarrollo personal y psicoterapia.
“Con el tiempo me di cuenta que yo
no podía seguir hablando de cosas que no
conocía, y que todo el aprendizaje que tenía
debía ponerlo en práctica. Por eso decidí
crear mi propia empresa y llevaba cajas de
resmas de papel de Barranquilla (Colombia)
a Maracaibo. Hoy tenemos 17 empleados
en este negocio”, dice con emoción.

Ha facilitado más de 45 mil horas de
aprendizaje, para altos ejecutivos y

personal de contacto con empresas
nacionales e internacionales..

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